En términos generales la Convergencia de las Culturas se propone facilitar y estimular el dialogo entre las culturas, luchar contra la discriminación y la violencia y llevar su propuesta a todas las latitudes.


El presente material resume los principales aspectos organizativos del organismo:

  1. Aspectos generales
  2. La coordinación de base y la coordinación nacional.
  3. La coordinación mundial
  4. Los grupos de Convergencia de las Culturas (en la base)
  5. Funciones conjuntas
  6. Participación
  7. Los materiales y libros oficiales
  8. Economías
  9. Aspectos institucionales

Estos lineamientos tienen por objetivo definir un modelo de organización y funcionamiento común en sus aspectos más generales.

Convergencia de las Culturas es una organización de carácter mundial; en este sentido sus miembros, independientemente del lugar dónde actúan, se sienten parte de una misma acción mundial humanizadora que se expresa de manera diversa pero convergente. Por lo tanto es fundamental la homogeneidad de contenidos ideológicos en todas sus manifestaciones.

Sus formas de participación son abiertas y flexibles. Se trata de una organización de base humana en la que cada persona se hace responsable de aquello que impulsa y construye.

Las estructuras básicas de Convergencia de las Culturas son los “equipos de base” que desarrollan sus actividades en barrios, escuelas, universidades, lugares de trabajo, por Internet, etc.

Estos equipos iniciales de C.C. son coordinados en un primer momento por aquella persona que ha promovido su puesta en marcha y que los desarrolla siguiendo los objetivos planteados en los documentos y materiales oficiales de la Convergencia de las Culturas. Estos “equipos iniciales o promotores” se constituyen en “equipos de la Convergencia de las Culturas” cuando logran un mínimo desarrollo (alrededor de 10 participantes) y permanencia (reuniones periódicas). Se realizará anualmente una elección en la que participan todos los miembros plenos del equipo, para confirmar o reemplazar a este coordinador inicial.

Según se van desarrollando estos “equipos de base de la C.C.”, se van presentando necesidades de coordinación con otros equipos de la C.C. que actúan en un mismo país. Cuando se llega a un número de 10 equipos de base, los coordinadores de estos equipos forman un “equipo promotor” que convoca a elecciones para elegir al primer equipo nacional. Las personas que integrarán este equipo nacional serán elegidas por votación directa de los miembros plenos del organismo en el país, cada dos años.

Este equipo nacional tiene por función coordinar acciones conjuntas (campañas, foros, encuentros, respuestas a situaciones de conflicto, etc.), llevar las cuestiones administrativas y legales, coordinar las relaciones con la prensa y con otras organizaciones, llamar a elecciones para su renovación cada dos años y otras funciones que se vean convenientes.

Estas funciones están exclusivamente al servicio del conjunto, responden a un mandato con lineamientos precisos y pueden ser reelegidas.

Siendo la convergencia de las culturas el tema central del organismo, se reservará un cupo de funciones en el equipo nacional para que miembros plenos de distintas culturas puedan asumirlas, independientemente del resultado de las elecciones.

La coordinación mundial es responsabilidad de un Equipo Mundial elegido cada dos años por votación directa de los miembros plenos del organismo en todo el mundo.

El equipo mundial tiene la responsabilidad de la coordinación de la C.C. a nivel mundial. Podrá proponer acciones coordinadas de diferentes amplitud y alcance.

Siendo la convergencia de las culturas el tema central del organismo se reservará un cupo de funciones en el equipo mundial para que miembros de distintas culturas que estén activos en el organismo puedan asumirlas, independientemente del resultado de las elecciones.

En caso de decisiones importantes, que afecten el posicionamiento y desarrollo del conjunto, se realizará una consulta general que garantice la participación de todos los miembros plenos del Organismo. Si se considera necesario, podrá apelarse a una votación mundial y directa sobre el tema.

Estos equipos se reúnen periódicamente en torno a los materiales de Convergencia de las Culturas con el objetivo de esclarecerse sobre los aspectos ideológicos y sobre los objetivos del organismo, promover relaciones entre las diferentes culturas, denunciar y luchar contra toda forma de discriminación manifiesta o larvada y difundir la ideas y actividades de la C.C. Además disponen de los encuentros y retiros de estudio y practicas del Movimiento Humanista de modo que los que así lo deseen puedan realizarlos.

Existen también Equipos de la C.C. que desarrollan sus actividades de modo virtual aprovechando el uso de las nuevas tecnologías.

Desde su formación, los Equipos de la C.C., impulsan la puesta en marcha de tres mecanismos o funciones básicas para su crecimiento:

  • crecimiento: orienta su acción hacia otras personas, hacia otras redes y organizaciones con el objetivo de hacer conocer sus planteos, propuestas y herramientas.
  • comunicación: mantiene una fluida comunicación e intercambio con otros equipos de C.C. y con otras organizaciones afines a sus objetivos.
  • formación: atiende a la progresiva formación de sus miembros poniendo a su disposición las herramientas para su desarrollo personal, cultural y social. Estos estudios y prácticas se encuentran en sus materiales oficiales.

Estos equipos de la Convergencia de las Culturas generan vínculos con otros grupos y organizaciones de su medio, pero por ningún motivo establecen una relación orgánica con ninguno de ellos.

Los equipos de base podrán, si lo consideran necesario, definir algunas funciones que faciliten la acción conjunta, por ejemplo:

  • Función de vocero: responsable de representar la Convergencia de las Culturas en actividades institucionales, ante la prensa y en toda actividad o situación donde se necesite exponer los puntos de vista de este organismo.
  • Funciones de relaciones con otras organizaciones
  • Funciones legales y jurídicas
  • Funciones de prensa y difusión.
  • Otras funciones ad-hoc.

Estas funciones son elegidas por votación y tienen una duración de 1 año. Estas funciones son exclusivamente de servicio al conjunto, responden a un mandato con lineamientos precisos y pueden ser reelegidas.

La participación está abierta a toda persona, sin discriminación alguna. Cualquier persona que coincida con los objetivos básicos de la Convergencia de las Culturas puede integrarse a la organización, sumándose como miembro pleno o adherente y así colaborar con las actividades planificadas, participar de las reuniones de formación y capacitación, y promover nuevas acciones.

Miembros plenos: participan en las reuniones, impulsan su crecimiento, se capacitan en base a los materiales propuestos y contribuyen al sostenimiento del organismo con su aporte anual. Son los responsables de elegir por voto directo al coordinador de su equipo de base y a las funciones de los equipos nacionales y mundiales. Impulsan el desarrollo y la formación de nuevos equipos sin limitación geográfica.

Adherentes: reciben información, participan de las actividades y colaboran con su desarrollo.

Cualquier grupo, organización o agrupación que, sin perder su propia identidad, manifiesta su adhesión a los principios que inspiran a C.C., podrá solicitar su inclusión como “adherente” de la C.C. y mantener con ésta relaciones de mutua colaboración.

La Convergencia de las Culturas cuenta con materiales oficiales y materiales recomendados:

Materiales oficiales:

  • Cuaderno de la C.C.
  • Manual de Formación para los Miembros del MH.

Materiales recomendados:

  • Documento del Movimiento Humanista
  • Autoliberación
  • Obras Completas (Silo), volumen I y II
  • Apuntes de Psicología (Silo)

Existen también numerosos aportes que van haciendo los miembros de Convergencia de las Culturas en el desarrollo de sus puntos de vista y en su aplicación a campos específicos que van ampliando la bibliografía recomendada.

C.C. se sostiene con el aporte anual de sus miembros plenos.

Esta cuota se fijará en base al sueldo promedio de cada país y se recolectará una vez por año en la misma fecha para todos los miembros plenos del organismo.

Se podrán también organizar colectas ocasionales en base a las necesidades que surjan en las cuales participarán de forma voluntaria los miembros plenos y adherentes del organismo. Los montos de dicha colecta nunca podrán superar el monto del aporte anual.

Coherentemente con una organización de base humana, los fondos para su sostenimiento provienen de sus miembros y de su crecimiento.

De acuerdo al grado de desarrollo y crecimiento de la C.C en cada país, y con el fin de facilitar el desarrollo de los objetivos en su relación con su medio, los Equipos tienden a obtener su personería jurídica como “asociación civil sin fines de lucro” (o figura similar según la normativa de cada país).

Los estatutos o cartas organizativas de estas “asociaciones sin fines de lucro” reflejarán en la práctica una orgánica y principios idénticos a los planteados en los materiales organizativos oficiales a nivel mundial.

A nivel mundial, Convergencia de las Culturas se organiza como una “Federación Mundial” que agrupa a todos los Equipos de la C.C. del mundo:


rEvoluciona

«Hoy es necesaria la formación de ámbitos donde se rescaten las ideas, las creencias y las actitudes humanistas de cada cultura que, mas allá de toda diferencia, se encuentran en el corazón de los diferentes pueblos e individuos…»